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martes, 29 de marzo de 2011

MIRAME, SOY MONSTRUOSAMENTE BELLA...

...se trata del encuento, o mejor ,el desencuentro con el otro, el prójimo, el extranjero, el otro sexo, la muerte, lo "sobrenatural", etc, y es por demás conocido el peligro y terror que amenazan, en este tipo de encuentros...
Es que al enfrentarnos con un otro, hay inevitablemente reciprocidad de miradas!
Es que cada uno ve la mirada del otro y se ve en ella?
Animate a sostener la mirada con un otro, conmigo...

Medusa se hace,no se nace.


"La mirada de Medusa,paraliza y me mata por que es mi propia mirada horrorizada ante lo real,lo que veo proyectada en ella.
Aquello que nos enfrenta a lo real en el preciso punto en que lo simbólico desfallece al intentar dar soporte a una imaginarización"
                                          Daniel Gil

...el por que de La Mirada de Medusa?

Según la mitologia griega, Medusa era originalmente, una hermosa mujer humana.
Poseidón se enamoro de Medusa, la sedujo...y la violó.
Tal circunstancia, exigió de ella un avatar, para que no existiese mortal ni divinidad que no le tuviese temor.
Su beldad adquirio de manera admirable para mi, una aspecto terrible : en vez de pelo, de su cabeza crecían serpientes, quizas como símbolo de confusión y enredos entre la locura y la cordura que llevaría como estigma tras la profanación absurda de su cuerpo.
Su blanca y sedosa piel se recubrió de escamas de dragon, tal vez para resguardar y preservar su endeble alma  dañada.
Su preciosa sonrisa portó decorasa un par de afilados colmillos de jabalí. Dos, no uno, reforzando así el dudoso deseo de quien osara acercarse a besarla.
Sus delicadas manos transformosen en garras de bronce. Pues serian,duras y frias como el metal, no ocacionando jamás suaves ni cálidas ,sino por el contrario, obstinadas en devolver borrascosas caricias.
Se implantaron en su espalda dos alas de oro q no le impidieron volar. El oro único metal imposible de combinar con otros (no posee esa debilidad) ,representa la perfeccion y la meta a la que aspiran el resto de los ellos. Y tal color en ellas,no es más q el sublime blindaje hacia la suprema elevación.
Y si miraba directamente a alguien a los ojos, al momento lo dejaria petrificado.
En cuanto a su mirada todo dicho está... SOLIDIFICADO, FOSILIZADO, LAPIDIFICADO, es decir no volveras a moverte jamás,nunca jamás...
Medusa embarazada de Poseidón, fue decapitada de noche por un "principe heroico"...(ja!) de nombre Perseo,quien debió recurrir a una espada especial q atravesara el escamoso cuerpo y de un escudo en donde se reflejara la mirada de ella, pues era incapaz (él tambien y van...) de sostener la mirada.
Se dice q la sangre de Medusa resucitaba a los muertos y a los heroes.
Aún así,de su cuello broto su descendencia : el caballo alado Pegaso y el gigante Crisaor.
Su legado entonces, la fuerza de volar agigantadas con la salvaje sabiduria de inmovilizar lo pernicioso.
Unica GORGONA mortal.
Deidad terrena, "reina" peligrosa, imagen monstruosa de cabeza fantasmal, habitaba en el lejano occidente,al otro lado del reino de los muertos, donde se encontraban los limites de la noche.

Desde esta sociedad que rotula a la mujer solamente segun la edad, la belleza,lo externo, donde solo es importante la imagen, lo que se ve, no lo que se siente, ni lo que pensamos...lejos de imaginarnos víctimas, somos heroinas, siempre!




lunes, 28 de marzo de 2011

Bienvenidas/os







Así comienza un viaje de ida…

Un viaje donde las mujeres somos protagonistas, desde el interior y al otro lado de la ventanilla. Un viaje de panoramas extraños observados por una mirada femenina capaz de inmovilizarlos como piedra, echarles un nuevo vistazo y convertirlos en paisajes donde ya hemos estado antes.
Un viaje donde hoy dejamos algo atrás: la edad dorada de la juventud. Pero no es tan malo como parece, al menos no vamos de pie: “Señora, le dejo el asiento. Sientesé, por favor”. Mmm… señora. Se-ño-ra. Algunas se harán las distraídas; otras se negaran ante la amabilidad mintiéndose a sí mismas (“no me duelen los juanetes, no me duelen los juanetes, no tengo juanetes”).
Sabemos que nada es eterno, y menos con la gravedad dando vueltas por ahí. No hay mucho qué hacer al respecto. Las cosas se caen, se aflojan. Y luego resulta que no hay suficientes cremas anti-age, ni tinturas permanentes, ni fajas invisibles. Pero la persistencia es una virtud, y tras horas y kilos de maquillaje ella, adolescente eterna, logra salir a la calle con el puño cerrado dispuesto a dirigirse al primer boca sucia que se atreva a llamarla “señora”.
Aunque claro, no todo gira alrededor del espejo. Pasado el “Culo, levántate” y el “¡Ay, las pata’e gaio!” no queda más que ceder al hecho de que Carmen ya no es Carmencita. Se hacen presentes las molestias, los dolores, las limitaciones. El alcohol hace efecto en los primeros cuatro sorbos y la resaca dura en los siguientes cuatro días, los chequeos médicos de rutina se convierten en una rutina de chequeos médicos y de pronto pensar en el servicio fúnebre ya no parece una tan morbosa idea.
Pero una no cambia sola, el alrededor también lo hace. El macanudo cambia a piola, el asalto cambia a joda (joda de fiesta, no de chiste), la moda cambia a retro, y, de un segundo a otro, el pasó a ser ud. Entonces ella dice cosas como “cuando yo tenía tu edad…”; “en mi época…”; “si tuviese X años menos…” “ya no estoy para estos trotes”; “¡qué bodrio! Ya estoy vieja” ¡Pero, mujer, por favor… bodrio, eso ya no lo dice nadie! Las nuevas generaciones ya no tiran las agujas, ni cachan nada; solo quieren celu con blutú e internés con guifí (“¿Y eso con qué se come?”). Esas nuevas jergas que dejan en evidencia la edad. ¡Basta de arameo, ahora se habla inglés!
Lo cierto es que el tiempo sigue su curso. Nacimos y emprendimos un viaje de ida; arriba de un bondi, no de un Delorean. Entonces, ¿Por qué negar lo inevitable? Vos, mujer, que estás creciendo en edad, todavía queda mucho por descubrir, esta no es la última parada.

Hoy nace la mirada de una Medusa que nació hace 41 años.